Los presupuestos anuales y los planes de negocio son herramientas clave de gestión empresarial que toda empresa necesita.

La elaboración y el seguimiento de presupuestos y planes de negocio son fundamentales para el éxito de cualquier empresa. En ellos se recogen los objetivos financieros y operativos de la empresa para un periodo determinado.

Un plan de negocio plurianual proporciona una visión a largo plazo, mientras que un presupuesto anual establece metas específicas para el año en curso.

¿Qué son los planes de negocio plurianuales?

Los planes de negocio plurianuales son documentos de mayor alcance que los presupuestos anuales. En ellos se definen los objetivos a largo plazo de la empresa, así como las estrategias y acciones necesarias para alcanzarlos.

Los planes de negocio plurianuales son importantes por las siguientes razones:

• Permiten a la empresa tener una visión a largo plazo y tomar decisiones estratégicas que sean coherentes con sus objetivos.
• Ayudan a la empresa a identificar y gestionar los riesgos.
• Facilitan la comunicación con los inversores y las entidades financieras.

¿Qué son los presupuestos anuales?

Los presupuestos anuales son documentos que recogen los objetivos financieros y operativos de la empresa para un año. Son una herramienta clave para la planificación y el control de gestión de la actividad de la empresa.

Los presupuestos anuales son importantes por las siguientes razones:

• Permiten a la empresa asignar los recursos de forma eficiente.
• Ayudan a la empresa a controlar sus gastos.
• Facilitan la toma de decisiones.

Conceptos clave que se deben manejar para elaborar y comprender los presupuestos y planes de negocio

Para comprender los planes de negocio y presupuestos, es necesario tener en cuenta los siguientes conceptos clave:

• Ingresos: Representan el dinero que una empresa recibe por la venta de bienes o prestación de servicios. Son imprescindibles para mantener la operativa de la empresa y financiar futuras inversiones.
• Gastos: Constituyen desembolsos que una empresa realiza para operar y mantener su actividad. Controlar los gastos es esencial para mantener la rentabilidad.
• Inversiones: Constituyen el desembolso de recursos financieros para la adquisición de activos fijos o intangibles que permitan a la empresa realizar sus actividades o mejorar su productividad o capacidad de producción.
• EBITDA: Es el beneficio antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización. Mide la rentabilidad operativa de la empresa y es una métrica importante en la toma de decisiones financieras.
• Financiación: Representa la forma en que una empresa obtiene los recursos necesarios para operar y crecer, ya sea a través de préstamos, capital propio o inversores externos.
• Rentabilidad: La rentabilidad mide la eficiencia de la empresa en la generación de beneficios. Es un indicador clave para evaluar el éxito financiero.
• Flujo de efectivo: El flujo de efectivo se refiere a los ingresos y gastos de efectivo en un período determinado. Garantizar un flujo de efectivo positivo es crucial para mantener la solidez financiera.
• VAN (Valor Actual Neto): El VAN es una métrica que evalúa la rentabilidad de una inversión a lo largo del tiempo, teniendo en cuenta el valor del dinero en el tiempo. Un VAN positivo indica que una inversión es rentable.
• TIR (Tasa Interna de Retorno): La TIR es la tasa de rendimiento que una inversión generaría. Cuanto mayor sea la TIR, más atractiva es la inversión.

Etapas del proceso de elaboración de un plan de negocio o presupuesto

Para elaborar el presupuesto de tu empresa o un plan de negocio se deben dar los siguientes pasos:

• Reflexión basada en la situación real de la empresa: Hay que reflexionar para definir que se quiere conseguir, tanto a nivel de ventas como de resultados. Esta reflexión tiene que ser realista y fundamentada en la situación actual de la empresa, ya que “el papel lo aguanta todo”. No podemos, por ejemplo, presupuestar que se duplica la facturación, si la estructura de la empresa no puede soportar ese crecimiento y no se asignan los recursos necesarios. El presupuesto es una excelente herramienta para reflexionar sobre el futuro del negocio, definiendo objetivos y los recursos necesarios para alcanzarlos. Para ello, hay que analizar en profundidad el negocio, identificando las fuentes generadoras de ingresos, los gastos asociados a las diferentes actividades y los procesos necesarios para el desarrollo de la actividad empresarial. Además, se deben identificar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas de la empresa.
• Planificación y definición de los objetivos: La primera etapa consiste en definir los objetivos financieros y operativos de la empresa y planificar las operaciones que se van a realizar en el próximo ejercicio o ejercicios. Estos objetivos deben ser: específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales.

Antes de iniciar cualquier plan financiero, es fundamental que todos los departamentos y equipos de la empresa estén alineados en torno a los objetivos definidos. Esto garantiza una dirección coherente y una mayor probabilidad de éxito. En la planificación hay que tener en cuenta las implicaciones financieras de cada decisión, que debe evaluarse en términos de costes y beneficios.

• Estimación de ingresos: La estimación de ingresos implica prever la demanda del mercado y fijar precios competitivos. Esto requiere una comprensión sólida del mercado y un análisis detallado de la competencia.
• Determinación y estimación de gastos: Identificar y estimar los gastos operativos es otra etapa clave. Se deben determinar los costes fijos, como el alquiler, y variables, como materiales y mano de obra.
• Determinación del presupuesto de inversiones: Hay que definir las inversiones necesarias para el crecimiento o la mejora de la empresa. Para ello se debe realizar un análisis de retorno de inversión (ROI) y hacer un estudio para determinar la capacidad de la empresa para financiar estas inversiones.
• Cálculo del presupuesto de financiación: Se debe determinar el importe de los recursos financieros que la empresa va a necesitar para cubrir sus necesidades de inversión y circulante.
• Elaboración de la proyección de los Estados Financieros: Se deben crear estados financieros proyectados de la cuenta de resultados, el balance y el estado de flujo de efectivo. Estos documentos proporcionan una visión clara de la salud financiera de la empresa en el futuro.
• Determinación de los flujos de caja: Se deben de evaluar los flujos de efectivo proyectados para garantizar que la empresa tenga suficiente liquidez para operar sin problemas.
• Escenarios y Seguimiento del presupuesto: La incertidumbre es inevitable en cualquier presupuesto, por lo que se deben crear escenarios que permitan anticipar diferentes resultados y ajustar el presupuesto en consecuencia. Además, el seguimiento constante del presupuesto garantiza que la empresa se mantenga en el camino correcto y pueda tomar medidas correctivas si es necesario.

Por lo tanto, la elaboración y el seguimiento de presupuestos y planes de negocio es de vital importancia para la gestión financiera efectiva de una empresa, ya que facilitan la toma de decisiones y la optimización de los recursos de la empresa.

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José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Colaborador del CEF.-