¿Qué puede hacer el empresario para garantizar que le están llevando bien la contabilidad?
Así, como en otras profesiones, la falta de pericia se pone rápidamente de manifiesto, en la contable, los errores pueden tardar en detectarse. Sin embargo, para que la falta de pericia tarde en detectarse, tiene que estar en consonancia con otros tres factores:
- La falta de control de esa actividad contable.
- La falta de conocimientos de la persona que debería supervisar la contabilidad, ya que será difícil realizar control alguno si no se tienen unos conocimientos básicos de contabilidad.
- La falta de tiempo para analizar y supervisar la información contable, que posponga reiteradamente los debidos controles.
En las grandes empresas para garantizar que la contabilidad refleja la imagen fiel y que está libre de errores, se requiere la realización de un informe de auditoría, de manera que un profesional de la contabilidad, debidamente formado y con la debida experiencia, certifica que las cuentas anuales de la empresa reflejan la imagen fiel y que se han realizado conforme a la normativa contable vigente.
En las pymes, estos controles por parte de auditores no son obligatorios, debiendo encomendarse el empresario al buen tino a la hora de contratar contables o asesorías, ya que normalmente no es el empresario el que se encarga de la llevanza de la contabilidad.
Sin embargo, es conveniente que el administrador de una sociedad tenga conocimientos de contabilidad y finanzas, además de para saber si sus contables o asesores realizan medianamente bien su trabajo, por otras tres importantes razones:
- Si el administrador no tiene unos mínimos conocimientos de contabilidad difícilmente entenderá las cuentas anuales que está firmando y de las cuales se responsabiliza.
- Para la comprensión y obtención de información de los estados contables (balance y cuenta de resultados) que sea de utilidad para la toma de decisiones.
- El conocimiento de los conceptos y terminología clave del «lenguaje contable y financiero» facilitará la tan importante interacción entre el administrador o gerente y su contable y/o asesor.
5 controles que puede realizar el empresario para asegurarse de que le llevan bien la contabilidad
Para hacerse una idea de cómo está su contabilidad, el empresario puede realizar cinco sencillos controles:
- Pedir un balance de sumas y saldos y ver si hay saldos contrarios a su naturaleza, es decir, clientes con saldo en el haber, proveedores en el debe, cuentas bancarias en negativo, cosas que pueden suceder por abonos de clientes o proveedores o descubiertos en cuenta, pero que no debieran ser una generalidad, siendo conveniente revisar esas cuentas.
- Revisar si existen partidas pendientes de aplicación, para lo cual se debe pedir un mayor de las cuentas 555.
- Comprobar las conciliaciones bancarias, es decir, que los extractos bancarios coinciden con el mayor contable de la cuenta del banco a una fecha dada.
- Revisar los cuadros de amortización, para asegurarse de que se están amortizando correctamente todos los inmovilizados.
- Comprobar que las existencias físicas coinciden con las del sistema de información de la empresa, haciendo un recuento físico, que puede realizarse por artículos, o familias, si no se quiere realizar de todo el inventario.
En cualquier caso, para la realización de estos controles y saber interpretar los estados financieros de las empresas, que emanan de la contabilidad, los administradores de las empresas deben tener unos conocimientos mínimos de estos temas, por lo que el CEF.- facilita a los interesados el Curso Monográfico sobre Finanzas para No Financieros, con el objeto de que los interesados puedan obtener una visión integrada de los conceptos e instrumentos claves de contabilidad y finanzas imprescindibles para el análisis, planificación y control de las actividades y resultados de la gestión de la empresa.
José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Director Administrativo y Financiero (CFO)